DIOS JUEGA FÚTBOL...SE LLAMA LIONEL MESSI

.....y juega en el Barcelona de España.

Simplemente EXPECTACULAR, hoy por hoy Messi es uno de los mejores jugadores del mundo. Sus cuatro goles marcados hoy por la tarde al Arsenal de Inglaterra ( vaya equipito,no?) demuestran que el hombre es simplemente un genio tras el balón.

Viendo la repetición de los goles vean las caras de los jugadores ingleses, parece que no pueden dar crédito que este pequeño y flaquito jugador ponga de vuelta y media a una defensa fuerte y humillar a Almunia , que tampoco es un arquero del montón.

Ya hace unos días, Lionel, o mejor hay que decirle Lío, por los líos que causa en las defensas rivales; sorprendió al mundo anotando sendos hat tricks en los cotejos de la Liga de las estrellas, pero esta vez lo hizo nada más y nada menos que en un match de la UEFA Champions League, una de las mejores ligas del planeta. Y lo hizo de la manera más canchera, como si jugara al fútbol una década en la profesional, tiene 22 años y verlo correr con esa vitalidad propia de su edad, alejado de la mala noche y de las malas juntas demuestra que hoy por hoy es uno de los mejores jugadores del mundo, y tomando las palabras de los comentaristas de Fox, está jugando en el mejor equipo del mundo.

Es sin lugar a dudas una de los mejores prospectos futbolísticos para ver en el próximo mundial de Sudáfrica, pero los que somos hinchas del buen fútbol y sobretodo del fútbol bien jugado, aquel que propone semana a semana Lío, esperemos que no salgan los destructores del buen fútbol y no salgan a darle su 'chiquita' y lo lesionen de gravedad.

Ver jugar a Messi es ver el fútbol bien jugado e hilvanado, ese fútbol nacido de la pista, de la canchita maltratada del barrio, vean las definiciones que hizo esta tarde; las cuatro de diferente manera, y esos cuatro goles son hermosos, y si se fijan él solo hace goles bonitos. En España soy simpatizante del Real Madrid, pero creo que si el día del clásico le hace un lindo gol a Casillas (otro gran exponente del fútbol actual) creo que lo gritaré como un reconocimiento a un gran jugador de fútbol, y sobretodo, a una gran persona que derrocha humildad y sencillez en sus declaraciones y en su forma de actuar, sino vean las imágenes al término del partido: sonriendo con la cabeza gacha, estrechando la diestra a los rivales y recibiendo la felicitación de los compañeros y la ovación del público, notarán que al más puro estilo del guapo de esquina, toma el balón y abandona la cancha dandole botes contra el gramado y colocándosela bajo el brazo.

La historia del fútbol dirá que un 6 de abril de 2010, Dios bajó un momento a la cancha del Neu Camp, se puso la camiseta número diez, aquel que la inventiva popular a inmortalizado como "D10s"; y nos hizo deleitar con cuatro hermosos goles e hizo que la exigente hinchada culé aplaudiera de pie a ese pitosito blanquiñoso con rasgos de genio de uno los deportes más lindos que hay.