Parece que el ciudadano común y corriente está "....al borde de la cornisa, a punto de caer...." como decía la letra de la canción "Persiana Americana" del gran Gustavo Cerati en el recordado grupo Soda Estereo. O peor aún ,cuando íbamos por primera a La Montaña Rusa y nos moríamos de miedo cuando estaba en la parte de arriba y el carrito se acercaba a la primera bajada.
Y es que la situación en la que estamos los electores para este domingo 10 son por demás temerarias. Bueno fuera que estemos indecisos por no saber por quien votar entre candidatos con buenas propuestas electorales; sin embargo estamos ante candidatos que redujeron la campaña electoral en una guerra verbal y sin altura para la democracia de un país soberano como el nuestro. Bueno, es un decir esto último también.
El hecho que Ollanta Humala haya estado punteando en las encuestas indica que el nuestro, e sun país en el cual el resentimiento está aún vigente, porque si analizamos el discurso de Humala el mismo está cargado de odio, resentimiento, más aún guiado por el presidente venezolano Hugo Chávez Frías, lo cual en un eventual gobierno humalista, Chávez tendría un aliado clave en Ollanta.
Por otro lado tenemos a Keiko Fujimori. La hija del preso Alberto Kenya Fujimori Fujimori. El mismo hombre que de seguro estaba al tanto de los crímenes de La Cantuta y Barrios Altos. El mismo sujeto que torturó a su esposa Susana Higushi, provocando sin duda un gran cisma dentro de la familia Fujimori, y en la cual ahora su hija (que de una manera contradictoria dice que trabajará fuerte en la educación, entonces, ¿por qué estudió gran parte de su vida universitaria fuera del país que supuestamente amaba?) es una pieza clave de su ajedrez de ambición y poder.
PPK. Quien para mí es un verdadero "caso" sinceramente. Dudo (lo confieso) si votar por él o no. Por momentos me inspira confianza, por otros, no. Más desconfío de su entorno que son personas que buscaron (y buscan) el poder a como de lugar, un hipotético gobierno suyo sería incierto, más que nada la actitud de quienes lo rodean.
Luis Castañeda Lossio hace buen tiempo perdió la brújula de la campaña y como persona. En una actitud por demas soberbia renunció a la alcaldía de Lima el último día que tenía plazo para hacerlo como para dar misterio a su "brillantez" política. Luego salió a la luz el caso "Comunicore" que le bajó la llanta de la preferencia y por si fuera poco empezarona despegar candidatos como PPK, el mismo Humala y Keiko. La última brillante idea que ha tenido es pedir a sus rivales que renuncien a sus candidaturas para ser él quien derrote a Humala en la segunda vuelta, otro craso error que comete el chiclayano que está fracansado casi en el ocaso de su carrera política y que puede marcar el inicio de su caída.
El hecho que Ollanta Humala haya estado punteando en las encuestas indica que el nuestro, e sun país en el cual el resentimiento está aún vigente, porque si analizamos el discurso de Humala el mismo está cargado de odio, resentimiento, más aún guiado por el presidente venezolano Hugo Chávez Frías, lo cual en un eventual gobierno humalista, Chávez tendría un aliado clave en Ollanta.
Por otro lado tenemos a Keiko Fujimori. La hija del preso Alberto Kenya Fujimori Fujimori. El mismo hombre que de seguro estaba al tanto de los crímenes de La Cantuta y Barrios Altos. El mismo sujeto que torturó a su esposa Susana Higushi, provocando sin duda un gran cisma dentro de la familia Fujimori, y en la cual ahora su hija (que de una manera contradictoria dice que trabajará fuerte en la educación, entonces, ¿por qué estudió gran parte de su vida universitaria fuera del país que supuestamente amaba?) es una pieza clave de su ajedrez de ambición y poder.
PPK. Quien para mí es un verdadero "caso" sinceramente. Dudo (lo confieso) si votar por él o no. Por momentos me inspira confianza, por otros, no. Más desconfío de su entorno que son personas que buscaron (y buscan) el poder a como de lugar, un hipotético gobierno suyo sería incierto, más que nada la actitud de quienes lo rodean.
Luis Castañeda Lossio hace buen tiempo perdió la brújula de la campaña y como persona. En una actitud por demas soberbia renunció a la alcaldía de Lima el último día que tenía plazo para hacerlo como para dar misterio a su "brillantez" política. Luego salió a la luz el caso "Comunicore" que le bajó la llanta de la preferencia y por si fuera poco empezarona despegar candidatos como PPK, el mismo Humala y Keiko. La última brillante idea que ha tenido es pedir a sus rivales que renuncien a sus candidaturas para ser él quien derrote a Humala en la segunda vuelta, otro craso error que comete el chiclayano que está fracansado casi en el ocaso de su carrera política y que puede marcar el inicio de su caída.
El panorama para el domingo la verdad que se presenta muy incierto, la verdad (y sin ánimo de pretender influenciar en la decisión de uds mis lectores) que no me quiero imaginar que se cumplan las 'profecías' de las encuestadoras entre una segunda vuelta entre Keiko y Ollanta, sería algo por demas desastroso para los intereses del Perú. Con una, volveríamos al tercer gobierno del reo Fujimori (¿qué; creen que será Keiko quien gobierne?), se acentuaría la corrupción, la pobreza, la injusticia, los crímenes de lesa humanidad. Y con el otro, será para que en un momento de ver Tv en la tranquilidad de nuestros hogares, la transmisión se vea interrumpida para escuchar la perorata nacionalista con libreto made in Caracas.
Ojo, no confunda el lector que estoy diciendo que no vote por uno o la otra; si votas por Keiko, u Ollanta, es tu rollo amigo lector; lo único que te pido es que pienses bien al momento de tener la cédula al frente tuyo, son 5 años de mandato que bien nos puede sacar del hoy donde nos encontramos, o bien nos puede seguir sumergiendo en la hediondez de la mediocridad donde nos encontramos desde hace buen tiempo
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