Lo manifestado en la víspera por la Presidenta chilena, Michelle
Bachelet, es bueno tomarlo tranquilamente.
A dos semanas de estallar el escándalo por el espionaje perpretado
por el traidor Víctor Ariza contra nuestra institución castrense, la
presidenta chilena con su declaración abre una nueva perspectiva
para superar el impasse.
Antes de partir a la XIX Cumbre Iberoamericana en Portugal, la mandataria declaró calmando las aguas: " No tenemos resultados concretos, pero vamos a seguir con un estudio profundo", declaró.
Lo que si dejó en claro, es que en lo que va de las investigaciones por parte del gobierno chileno es que aún no encuentran evidencias sustanciales que permitan ya sea admitir o desmentir el espionje por parte de la inteligencia chilena.
Sin embargo, se mostró renuente a afirmar si Chile comete actos de espionaje, indicando solamente que investigarán detenidamente toda evidencia que se le envíe desde Lima.
Si bien pueden encontrarse en la Cumbre que se lleva a cabo en Portugal no afirmó que sostenga alguna reunión bilateral con su par peruano para discutir el tema.
Es decir.... más de lo mismo.
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