Los bochornosos incidentes protagonizados la mañana del jueves por Aldo Valle, es lamentable. Pero nos hace pensar: ¿qué está pasando con nuestra sociedad?, ¿ya estamos sumergidos en la mediocridad?
A continuación un análisis no dedicado por entero al escándalo suscitado por este sujeto, sino un análisis que considero es la raíz del problema.
Antes de eso, hay que responder una pregunta: ¿Quién es Aldo Valle?.¿Un personaje conocido gracias a sus aportes para con la sociedad?,¿una persona tal vez, destacada que merezca la atención de la prensa escrita y televisiva?. No, Aldo Valle es un un don nadie. Saltó a la 'fama' por violar a Leslie Stewart, también tiene entre sus 'logros' el haber purgado condena en Estados Unidos por posesión de drogas.Este es el personaje que ha acaparado titulares en los diarios, notas de entradas de noticieros y , no pensé escribir esto, un lugar para comentar acá en este humilde blog.
¿Qué pasa con nuestra sociedad que hablamos más de lo que hizo y qué dijo Aldo Valle, en lugar de pensar cómo ayudar a pasar una navidad diferente a aquel niño de 3 o 5 años que duerme en una grada hedionda del centro de LIma cobijado bajo una placha de cartón?. Ahora, que no nos sorprenda que por edición navideña algún medio de comunicación tenga la 'primicia exlusiva' de hacerle una nota por navidad con saludos y discursos del tipo:" ...voy a cambiar, sniff!!, juro que voy a cambiar"; luego tras estas emotivas palabras habrá un acercamiento a sus ojos vidriosos, saldrán de estos gruesas lágrimas y la voz promocional en off dirá: " Alex Valle se confiesa, pide otra oportunidad".
Lo que pasa con nuestra sociedad es que nos gusta el morbo(me incluyo: no mentiré al decir que ví los reportajes del sujeto en cuestión en Magaly Tv, Enemigos Íntimos y Prensa Libre; tres tipos de hacer periodismo enfocados de diferentes ángulos).Nos gusta el chisme, saber que dijo fulano de tal, que le respondió el otro, lamentablemente es parte de nuestra idiosincracia, en un comienzo se fue forjando en el barrio y en el seno familiar, y luego se afianzó de manera más amplia.Y en esto es donde cabe de perillas la prensa 'chicha', la misma que alucina con fines de mundo, con temores infundados que el vecino sureño siente por nosotros, o el mismo que en algún momento en el proceso eliminatoria para el mundial de fútbol de la selección, lucían en sus portadas triunfantes: " Empatamos con Argentina, Sudáfrica nos espera", y luego cuando los resultados no acompañaban al equipo de todos escribían: " Fuera m...alos".
Ese es el periodismo que daña, que no contribuye.¿Nos quedamos que nuestros niños están en una sociedad mediocre, hundido en ese hedor nauseabundo de la miseria; cierto?.Amiga, amigo, quedate quieto en un kiosko de periódicos dos minutos, mira las portadas de esos diarios, verás titulares del tipo: "Fulana de tal pide a gritos: Quiero un hombre que me haga toda suya", "Más poses para que hagas rico chuculún". Y logicamente, al lado de estas frases (que por respeto he puesto las más 'suaves') van acompañadas fotos que están al límite para llegar a ser triple X.
Por eso es bueno pensar con cabeza fría, qué estamos haciendo por nuestros hijos, sobrinos, nietos, ¿nos preocupamos realmente por ellos?,¿los estamos hundiendo con nosotros en este lodazal de corrupción, mentiras,mediocridad?. El problema del jueves pasado no es Aldo Valle, el problema va más allá de él.Pregunto:¿cuántos casos de estos hay en distintos conos de Lima y al interior del país?.
Hay temas, personas que en verdad merecen atención que realmente valen la pena atenderlas a tiempo y con toda la premura del caso.
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